Horikoshi Gakuen II [Capitulo 43]

………03 de Febrero de 2015…..

Kira se mordía las uñas a mas no poder, quería matar a Daiki, matar a Aimi, quería, pero no podía, Daiki no era suyo.. y todo era su culpa.

—¿Qué te pasa Takahashi-senpai?

Le pregunto Dani mirándola con temor.

—nada.

Dijo aun enojada y se fue.

Dani y Suna miraron atónitas a la chica que daba pisotones por todo el pasillo subiendo por las escaleras del área de segundo año.

Kota miro desde la ventana del último piso, donde se encontraba completamente desocupado, solo se les era permitido subir a los sucesores de Horikoshi y Reyes.

—yamada ya está mejor..

Dijo escuchando un suspiro por parte de Yuma.

—se supone que esto no acabara hasta que Yamada no esté muerto..¿?

Ambos miraron la zona del aparcamiento quemada, recordando como desde la oficina se habían escuchado los disparos y luego la explosión del auto.

—¿y chinen?

Pregunto Hikaru mirando su celular.

—ni idea… solo lo vi cuando el auto de Yamada estaba en llamas.

Kota arrugo el ceño, le tenía afecto a Ryosuke y haría lo que fuera por vengarse.

—allí viene…

Dijo Yuma señalando al pequeño punto en la entrada de Horikoshi.

Ya era hora de almuerzo y solo se escuchaba hablar de vestidos, maquillajes, ropa importada, ropa de diseñador, todo tipo de cosas referentes a la graduación y la fiesta.

Aimi solo escuchaba a sus amigas pero nada le importaba, El Rey Daiki la había rechazado, eso era lo que le importaba, tampoco le había visto desde que entro.

Yuri estaba en el aula comiéndose un pan mirando por la ventana, pero sus pensamientos fueron interrumpidos por Susy quien entraba en ese momento al aula con su obento en las manos, lo dejo en la mesa frente a Yuri

—ten… al menos aliméntate bien.

Yuri la miro detenidamente y esta logro sonrojarse. El pequeño Bufo y tomo el obento de buena gana y comenzó a comerlo, Susy lo miro detenidamente y logro notar las marcas de golpes que tenía logrando ahogar un grito.

—¿Qué-¿Qué te paso?

Acto reflejo fue tocarlo pero Yuri la esquivo en silencio, Susy llevo sus manos a su pecho que ya le dolía de tanto esperarse a la respuesta del mayor.

—…

Quedaron en un largo silencio que solo torturaba a ambos, Yuri quería decir algo, pero nada le salía, Susy giro sobre sus talones y camino hasta la salida.

—estoy bien..

Alcanzo a decir antes que la chica se terminara de ir por los pasillos.

—...jmmm…

Miro hacia la ventana y noto la nieve caer de nuevo, la tormenta les haría difícil salir a mucho… de nuevo.

Las semanas pasaban igual, el trabajo y estudio de los últimos exámenes y los preparativos de la fiesta de despedida no eran pasados por debajo de la mesa, como tampoco los actos delictivos del ClanP.

……………….14 de febrero del 2015…………. Estreno de 50 sombras de Grey :v ……………

Todas las de último año querían ver el estreno de una película “50 sombras de Grey”, al ser menores de edad no se podía.

—pero sé que sería mejor con algún otro hombre~

—a mí me pareció atractivo~

—más atractivo es el Rey Inoo-sama.

El grupillo cotilleando echaron un suspiro y luego otro suspiro al recordar que ya estaba comprometido.

—a mí nunca me gusto esa chica… parece un muerto andante, toda pálida y delgaducha.

—es desagradable su aspecto, no sé qué le vieron Yamada e Inoo.

Comentaron con desagrado los eventos anteriores que incluían a Inoue Miki.

—es igual que Anastasia Steele.

Comenzaron a reír como locas.

—al menos tiene más suerte que ustedes en cuanto a sexo popular.

Comento Adari con recelo haciendo que las chicas de su salón callaran y el silencio se envolvía en un ambiente pesado.

—en vez de hablar de alguien que puede pisotearlas moralmente y sexualmente, concéntrense en los últimos exámenes.

Salió taconeando del aula y las chicas pudieron exhalar todo el aire contenido.

—gracias…pero lo hubiera hecho yo.

Comento Kei con las manos en los bolsillos por el frió.

—no te preocupes… señor Grey.

Comento con burla, haciendo bufar a Kei.

—mejor busco a mi anastasia~

Giro sobre sus talones y se fue en dirección contraria a la de Adari.

—¿Quién crees que sería bueno regalarle los chocolates?

Pregunto en forma de puchero una chica mientras seguía acomodando su caja con chocolates.

Keiko solo miraba de reojo llena de furia, su casillero tal vez en el día blanco tendrá más chocolates y regalos de parte de Hikaru, y para su mala suerte su corazón se aceleró y sus mejillas se tiñeron de rojo, tenía que salir de allí, no podía seguir entre tanto rosa y olor a chocolate.

Entre los pasillos era peor, solo veía a chicas con cintas lazos y demás corriendo por los pasillos otras cuchicheando y otras más.

Quería llorar, necesitaba a su mejor amiga, necesitaba alguien con quien hablar.

—auch! O-oye!...Izumi-san?

Miro con extrañeza Kira a Keiko que estaba al borde del llanto, se fueron escaleras arriba.

—¿paso algo? ¿Qué tienes?

Kira intento frotar los brazos de Keiko intentando buscar que hablara, esta al fin cayó al suelo de rodillas cubriéndose la boca con una mano mientras que la otra sostenía su vestido.

—no…no puedo más… no puedo más!!!

Grito entre lágrimas haciendo que Kira mirara con temor.

Un Chico iba de camino a bajar en la misma dirección donde Keiko gritaba entre lágrimas, esta se detuvo a escucharla no queriendo interrumpir la conversación de ambas.

—…

—no … no soporto esto… chocolates… rosas… cartas…—susurro mirando el suelo—  he hecho de todo para alejarlo!! —dijo en tono alto mirando ahora a Kira.

—Yaotome-sama es algo insistente.. eso es muy extraño…

Arrugo la frente Kira cruzándose de brazos

—lo se…

Murmuro sonrojada.

—¿te gusta?

El chico que estaba escuchando abrió los ojos sorprendido y presto más atención a la conversación, necesitaba esa respuesta, aunque fuera un asentimiento de su parte, observo la figura de la menor sentada en el suelo con el rostro lleno de lágrimas.

—lo amo… lo amo y no tengo remedio… mi padre me lo dijo… soy una idiota.

Hikaru bajo despacio las escaleras, su sonrisa no podía disimularla, ya la había escuchado. Kira miro sorprendida al mayor y Keiko aún más, horror y palidez se divisó en su rostro intento levantarse pero no lo logro, Kira se logró alejar un poco y Hikaru se arrodillo frente a ella.

—te he escuchado y créeme que no eres una idiota, mas idiota soy yo por hacerte confundir.

La chica se quedó sin palabras mirando la ligera sonrisa del mayor frente a ella, logrando sonrojarla.

—emmm.. yo.. debo ir a clases…

Dijo Kira mirando a ambos que no se quitaban los ojos de encima, sentía envidia, jamás Daiki la volvería a mirar así.

………………26 de febrero del 2015……………. Jueves…………

Keiko llego muy temprano por la mañana, el día al menos estaba nublado pero sin amenazas de tormenta, solo podía sentirse feliz desde el 14…

*Flash Back*

—entonces si lo aceptas?

Dijo Hikaru con suficiencia, Keiko solo hizo un sonido de molestia.

—ya lo escuchaste, ¿Qué más quieres?

Hikaru la pego a la pared en una esquina y le tomo del mentón.

—quiero que lo digas~

En tono dulce fue acercándose hasta llegar a sus labios escucho un murmullo placentero.

—te amo… hika—

Y antes de dejarla terminar ya la estaba besando despacio, comiendo sus labios lentamente, tirando del inferior y dejando su lengua danzar con la contraria.

*FIN DEL FLASHBACK*

Hika saltaba de felicidad en su auto y Daiki solo lo miraba como si fuera un extraterrestre, Yabu intentaba no prestarle atención ya que iba al lado de su amigo

—el amor los volvió idiotas… sin ofender Anguiano-san

Dijo Daiki sentado a un lado de Karina en los asientos traseros.

—no hay problema… pero ¿y tu? ¿Qué paso con Takahashi?

Daiki miro la ventana intentando buscar alguna excusa creíble.

—emm… nada… solo terminamos.

Dijo con torpeza ganándose una mirada preocupada de la mujer a su lado.

Ambos se dirigían a la fiesta en uno de los salones más tradicionales japoneses y más grandes del distrito.

—aaaww.. Estoy nerviosa!!

Karina se miraba muchas veces su Kimono, a pesar del frio, ya el invierno comenzaba a decir “adiós”

Había demasiada gente y entre reporteros, personas que ni se conocían unas a otras admiraban y felicitaban a Keiko por su cumpleaños. Hikaru valientemente atravesó la entrada del salón buscando con la mirada a Keiko quien la seguía un grupo de personas, cámaras y fotógrafos.

Sin miedo se acercó hasta ella y espero su turno para saludarla, el Jefe de la Policia de Tokio, Padre de Keiko lo miro con recelo y advertencia, Keiko solo pudo sonreírle con formalidad ante las cámaras.

—Feliz Cumpleaños… Keiko

Hikaru le tomo de la mano y beso está haciendo que las mejillas de Keiko se tiñeran de rojo.

Las luces de las cámaras captando el momento donde el hijo de los Yaotome besaba la mano de la hija menor del Jefe de la policía metropolitana de Tokio, Keiko se sentía más que feliz, sin que nada pudiera dañarla.

….

—no crees que es un linda noche?

Dijo con ilusión hika mirando el cielo despejado

—Hikaru~… hace frio

Se quejo Keiko haciendo puchero.

—vale, vale, ustedes y sus ganas de ser abrazadas~

Bromeo y abrazo a Keiko por la espalda recargando su mentón en la cabeza ajena.

—¿estas consciente que escoltas nos rodean?

Hikaru bufo y la apretó más contra su cuerpo, logrando ponerla más nerviosa.

—es que tu me lo pediste~

Comento infantilmente, haciendo sonreír a Keiko.

—no podias quitarte tu abrigo como buen caballero?

—yo quería abrazarte~

—no es la única cosa que quieres.

Comento seria notando que algo extraño rozaba su espalda baja, Hikaru rio leve y le beso la oreja.

—vale~ quiero algo más… pero sé que no podre… no me dejaras… ves? Soy un caballero.

Se defendió y separo de Keiko buscando en su bolsillo interno del saco.

—EH? Que buscas?

Hikaru saco rápidamente una caja con un anillo de oro con un diamante grande.

—se supone que debería pedirle permiso a tu padre primero…

Keiko miro sorprendida aquel anillo y quería llorar, llorar de felicidad al ver a Hikaru arodillarse y su padre mirar con asombro desde lejos como aquel chico que hizo sufrir a su hija le pedía ahora matrimonio.

—seré el hombre más idiota e inentendible del mucho… pero te amo como un condenado… cásate conmigo Keiko.

Y antes de que Keiko pudiera responder alguna cosa su padre los interrumpió.

—mi hija es muy joven e inocente para un chico como tú.

Hikaru y Keiko miraron al autoritario hombre a unos metros cerca de ellos.

—supongo que por todo lo que ha pasado, Señor Izumi, yo—

—te he puesto restricción lejos de mi hija, ¡su mejor amiga casi quiso matar!, esos son buenos motivos para decir que no.

Keiko sujeto el brazo de Hikaru que ya estaba de pie y firme mirando al padre de Keiko.

—mis sentimientos por Keiko son más fuertes que yo, mi intención no fue nunca lastimarla o hacerla llorar, yo la amo y ella ya me ha dado la oportunidad de acercarme, con todo respeto Señor Izumi… quiero hacer mi esposa a Keiko luego de graduarnos de la universidad.

—eh?

Keiko miro con asombro a Hikaru y su padre seguía sin hablandar el ambiente.

—pa-papá… por favor…yo… yo conozco bien a Hikaru.

Miro a su padre de manera dulce intentando convencerlo.

—Keiko… eres mi hija, este chico—

—este chico idiota que me hizo pelear con mi mejor amiga es el hombre que amo desde la primaria!, se que yo fue la tonta que huyo por miedo… pero… Padre, lo amo.

Le tomo las manos a su padre mirándolo con los ojos cristalizados, la postura dura de aquel hombre fue bajando lentamente, haciéndolo echar un fuerte respiro.

—esta bien. Pero si te pasa algo lo meteré a la cárcel de por vida.

Hikaru palideció ante la amenaza y Keiko sonrió abrazando a su padre.

—sabes que nunca lo harías.

Murmuro Keiko divertida.

—hay que darle un pequeño susto para que aprenda.

Dijo el señor Izumi abrazando de vuelta a su hija.