Chiisana Koi no Uta

Título: Chiisana koi no uta

Extensión: OneShot

Autora: Shute-chan

Personajes: Teff x Ryosuke, Elizabeth x Kei.

Teff es una alumna trasfería a esa escuela, luego de tomar asiento justo al lado de uno vacío, noto que este tenía un bolso correspondiente a una chica, cuando pasaron las tres primeras horas, ese asiento estuvo vacío, pero cuando sonó la campana del receso aquella chica entro cuando ya todos comenzaban a salir dejando solo a media clase.

-Ah!, este es tu asiento?¿-

Pregunto Teff muy alegre, lo cual la otra chica solo asintió.

-soy nueva y… puedes llamarme Teff-

Su sonrisa era radiante aunque tenía un poco de nervios, la otra chica bufo y mostro una sonrisa de medio lado.

-dime Elizabeth-

-un gusto!-

-siempre eres así?¿-

-eh?-

-de alegre-

Teff comenzó una plática mientras comía de un chocolate, pero parecía que Elizabeth no tenía ánimos de hablar.

-ne~ ne~… ¿pasa algo?-

Pero la chica dejo caer un suspiro y negó.

Trato de preguntar algo más pero sonó la campana dando por finalizado aquel receso. El resto del día fue peor, y la semana, y el mes; ya hacía un mes que conocía a su nueva amiga pero está siempre se encontraba en el mismo estado, jamás se atrevió a preguntar más allá, no hasta que la vio llorar.

-Eli-chan~ ¿Qué pasa? ¿Por qué lloras?-

Pregunto preocupada Teff acercándose a su amiga, esta solo se abrazó más a sus piernas y siguió llorando.

-¿le pasa algo?-

Una tercera voz se dejó escuchar, haciendo girar a Teff.

-no lo sé, la acabo de encontrar así-

La trataron de levantar y llevaron a la enfermería, aun con la chica dentro esta se negó.

*Narra Elizabeth*

Trate de negarme muchas veces, pero aquellas dos me jalaban a más no poder, todo lo que no quería era verle la cara a ese enfermero, no a él, desde que paso aquello, que ¿Qué paso?, todo comenzó antes de que Teff llegara.

…FlashBack…

Comenzaron a llegarme unas notas a mi casillero, trate de no prestarles atención a dicho papel, pero luego llegaban más y más, comencé a responderlos, gran error.

Me sentía feliz de que un chico de la escuela me notara, pero aun sentía que debía de desconfiar de aquello, tal vez los chicos querían molestarme haciéndome creer que yo le gustaba a alguien, decidí descubrir a esa persona por mi propia cuenta, escondiéndome cerca del lugar, un grupo de chicos del último curso, llegaron corriendo y mirando a su alrededor, pensé “lo sabía!, era una broma de los de tercero!”, me entristecí de saberlo, pero estos no se dirigieron a mi casillero, sino al de otra chica, dejando una nota allí y luego se fueron.

-espías a alguien-

Aquella voz me hizo dar un saltito en mi sitio volteando a mirarlo.

-ah!, sensei, lo siento-

El me miro con una gran sonrisa y revolvió mis cabellos, ¡¿eso no era raro?! , se supone que un profesor o mejor dicho por el enfermero no debe hacer algo como eso… mi corazón comenzó a latir con rapidez, sabía que no era muy mayor, unos 8 años mayor que yo para ser exactos.

Luego de que quise retirarme, se me olvidaba recoger una libreta, cuando iba llegando, ¡ESO TENIA QUE SER UNA BROMA! Y UNA MUY PESADA!...

-¿qu.. qué hace?-

Pregunte asustada por la respuesta, ¡pero era obvio!, él era el que me enviaba las notas.

-¡pervertido!-

Grite furiosa y algo asustada.

-n..no, por favor… déjame explicarte—

Trato de acercarse, pero yo me aleje y salí corriendo

Desde entonces llegan más notas, chocolates, flores y hasta peluches pidiéndome disculpas, pero jamás respondí y todos esos regalos los lleve a la basura.

…Fin FlashBack…

Y ahora ellas me llevan a ese lugar, trate de zafarme, pero no lo logre.

-ya llegamos-

Dijo Teff, parando frente a una puerta.

-dis—

Íbamos a tocar cuando aquella puerta fue abierta, nuestras miradas se cruzaron y yo la aparte rápido.

-que se les ofrece chicas?¿-

Lo oí hablar.

-no lo sé, estaba llorando y casi se desmaya-

Teff explico cómo me encontró y él nos dejó entrar.

>riiiiiiiiing< -chicas… será mejor que vallan a clases y dejen que su amiga descanse-

Ella asistieron y comenzaron a retirarse, yo estaba en la cama recostada, lo oí acercase a mí y me levante rápido.

-tranquila!, no te are nada-

Dijo apresurado y marcando distancia.

-ya te pedí disculpas, en verdad lo siento, y no, no soy un pervertido-

-¡cómo no lo vas a ser!, ¡me enviabas notas románticas! Y como tonta casi caigo-

Dije en tono desanimado y tomando asiento en la cama, él se alejó y busco un poco de agua, lo oí decir mientras me sumergía en mis pensamientos.

-ten-

Extendió aquel vaso, mire con desconfianza.

-no tiene nada, solo es agua-

Tome el vaso aun dudando si debía o no, pero a la final lo acepte.

-y dime… ¿Por qué llorabas?-

Me quede en silencio y el suspiro.

-te diré porque enviaba aquellas notas-

Lo mire atenta y el busco su silla de la mesa y quedo frente mío.

-aclaremos que… no soy un pervertido y que… tampoco quería jugar con tus sentimientos…-suspiros- sabía que si te enterabas de quien era, me odiarías… sé que mi trabajo involucra ver a chicas todos los días y que tú eres una menor, lo sé bien… pero…-

-¿pero?-

Espere, y espere… hasta que hablo.

-en verdad me gustas… me gustas mucho –suspiro pesado— sé que estos sentimientos son malos, jamás debí fijarme en una chica como tú… ¡no! No lo digo por nada malo, si no… por… tu edad, eres una estudiante… por eso escribí las notas, quería tontamente ganar tu confianza, puedes perdonarme-

Así que… él está… él está enamorado de mí?¿ … ¿en verdad?

-no… no te creo… ¿Por qué sientes eso por mí? ¿Desde cuándo?-

Mire de manera desafiante.

-desde que te vi… salvando a un pequeño gato en la calle… esa sonrisa, eso fue lo que más me gusto… aquí cuando caminas por los pasillos tu cara se mantiene neutra, sin expresiones, pero, aquel día~ … comencé a sentir todo esto-

Quede en shock, si, era cierto, cuando se iniciaron las clases tres semanas después, me toco ser parte de la limpieza y cuando estaba camino a casa salve a un gatito que cruzaba la calle.

Me quede tan sumergida en mis pensamientos que cuando note que me hacía… él estaba sobre mis labios y exigía una respuesta, me quede paralizada y aun así, no podía ni moverme… el termino el beso y acaricio mi mejilla, me sonrió de manera gentil, sentía mi cara arder.

-¿por qu—

-ya lo dije… me gustas… mucho-

Se volvió a cercar a mi quedando a centímetros de mi rostro, lo mire directamente a los ojos como si buscaba algo en ellos, me  sorprendí cuando el tomo mi mano y la llevo a su rostro, pasándola por sus labios y besando cada uno de mis dedos y la palma de mi mano, termino de acortar la distancia y volvió a besarme, pero esta vez sí acepte haciendo torpes movimientos, siguiéndole en ritmo, uno muy lento… poco a poco se volvía más y más dulce, más apasionado, más profundo; nos separamos al rato ya que el aire nos faltaba.

-entonces… ¿saldrías conmigo?-

No pronuncie ninguna palabra, solo fruncí mis labios y asentí lentamente.

-gracias-

Pego su frente de la mía… no sabía exactamente porque le había dicho que si… pero ya lo había hecho.

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*Narra Teff*

Espere a que se acabaran las clases y cuando era hora del almuerzo fui por mi amiga, en el camino, choque con un chico haciéndome caer.

-pero vaya~ … que tenemos aquí… lindas pantsu-

Cuando reaccione, cubrí con mis manos y me levante rápido.

-pervertido!-

Él se echó a reír.

-lo siento, pero, tú chocaste conmigo, no tengo culpa de que tus pantsu sean tan llamativas-

Mostro una sonrisa maliciosa y siguió con su camino.

-al menos dime tu nombre, idiota pervertido!-

Él se volvió a acercar y me tomo de la cintura, se acercó a mi oído susurrando.

-este pervertido… se llama Yamada Ryosuke-

Soplo en mi cuello y lo aparte rápidamente con un leve sonrojo en mis mejillas.

-pues… eres un pervertido!-

FIN