Día 18 de diciembre 2014
El frio
cada vez aumentaba, junto a sus días grises, apenas el primer lote de exámenes se
había hecho, el próximo verano comenzarían las actividades de todos los club de
Horikoshi.
―Colocar se
esté uniforme sin intentar morir de frio por las lluvia es todo un reto―
Se quejaba
Susy mientras caminaba al lado de Marianna, la otra chica solo caminaba en
silencio y miraba a todos lados, cosa que no paso de alto la pequeña Susy.
― ¿podrías
dejar de ser tan paranoica?―
Se volvió a
quejar, desde que sabían que el Clan Yamapi estaba tras de ellos, las chicas
estaban muy alertas.
― ¿Cómo no
quieres que no esté paranoica si pueden matarnos solo por diversión? O más bien
a mí por ser la novia de… ya sabes quién―
La pequeña Susana
quiso contener una gran carcajada, pero a la final su risa se escuchó por toda
la calle, haciendo que su amiga la mirara mal.
―Yamada-kun
no es tu novio, solo eres la chica de turno―
Un gran
silencio reino hasta que llegaron a las puertas de Horikoshi.
―siento que…
no lo soy―
Susana miro
a su amiga y esta soltó un suspiro.
―Ryosuke
tiene un corazón de oro, no es nada de lo que dicen las personas―
Marianna
lograba ver lo que algunas chicas no, el gran corazón que Yamada ocultaba ante
todas, un corazón herido por Nishiuchi, una antigua Reina Sexy, temida por
todas las chicas de Horikoshi.
….
Ya era el último
día en Horikoshi, luego de las vacaciones de invierno llegaría llegarían el último
semestre y, adiós a la escuela y otros felices de que llegara el bachillerato.
―este
uniforme no es seguro―
Dani por su
estatura tampoco le gustaba usar faldas hasta los tobillos, pero era tradición de
Horikoshi usar ese tipo de uniformes.
―Pero si te
ves como un fantasma―
Se burló Shintaro
ganándose un golpe con un libro por parte de Dani.
―aarg!! Agresiva!―
Shori se rio
fuerte.
―nunca te
metas con una chica bajita―
El grupo
estaba bien hasta allí, Shori, Shintaro, Umi, Dani y Suna, esta última miraba
preocupada a la chica parada junto a la ventana, hacía meses que Rina no se
juntaba con ellas ni siquiera a comer, mucho menos a fiestas, simplemente se la
pasaba sola.
….
―si suspira
de nuevo, me harás cachetearte Nakajima Raiya―
Amenazo Ryutaro,
pero su amigo no dejaba de mirar a
―Ichinose-san
es tan linda~―
Y como religiosamente
ya lo hacía, Ryutaro le doy dos cachetadas a Raiya, pero era imposible, el
chico no reaccionaba, y eso le gustaba de su amigo, así podía golpearlo de
nuevo.
―deja de
pegarse Morimoto Ryutaro―
El alto se tensó
en su lugar al escuchar la voz de Erika, aun no aclaraban que eran novios.
―pero es
que ya vez que no deja de mirar a Ichinose-san, por más que le hablo se queda así―
Señalo acusadoramente
a su embelesado amigo, la chica negó varias veces y luego le hablo a su novio, tenían
un plan, y este seria hoy mismo.
― ¿te
parece bien?―
Dijo al
separarse y el chico asintió feliz.
….
―Shiyoaki-san,
¿qué harás estas vacaciones?―
Pregunto Nathaly
tomando de su jugo al lado de sus amigas, Akari solo medito, Ary seguía comiendo,
su mente seguía en los resultados de los exámenes.
―pues, les
avise a mis padres que me mudaría, y bueno, Keito también lo sabe―
Nathaly
suspiro, era como su sus vidas fueran sido consumidas por sus novios, los Príncipes.
―Yuto tal
vez quiera secuestrarme o algo así―
Akari rio
por la cara de desgano de su amiga, Yuto era posesivo, pero adorable cuando
estaba junto a la pequeña de su amiga, Nathaly era de ese tipo de chicas
tsunderes que todo chico adoraría, chicos como Yuto.
― ¿y tú
Ary?―
Pregunto Nathaly
obviamente la chica estaba muy en su mundo.
―Ichinose!!―
La agitaron
ambas chicas.
― ¡los
resultados!―
Grito volviendo
en sí.
―si los
resultados, estas embarazada―
La cara de
horror de Ary y la risa de sus compañeras la hicieron sacar un puchero.
― ¡ustedes
son malas amigas!―
Akari y
Nathaly siguieron riendo.
Sakura aun
caminaba por los pasillos, si aún buscaba a Chinen, pero este no daba señales
de vida.
― ¿Qué te habrá pasado…yuri?―
Se cuestionó
entre pensamientos mientras miraba a los estudiantes pasar.
Janet
estaba en la planta de las reinas dirigiéndose directo a la oficina donde se suponía
que Adari la esperaba, pero antes de llegar la esperaba Kento, sus nervios se
fueron a flor de piel, todos sus recuerdo con Kento le llegaban con cada
latido.
― ¿Qué haces
aquí?―
Pregunto
estando a su lado.
―sigues
huyendo de mí… quiero mi respuesta ya―
Dijo algo
serio, aun con sus manos en los bolsillos, Janet soltó un suspiro.
―no tengo
ninguna respuesta para ti, luego de enterarme de todo esto yo―
―te doy
miedo―
Dijo sin
pensarlo mucho, sabía que algo como eso pasaría.
―claro que
no!―
Se defendió
rápidamente, haciendo que el chico la mirara directamente a los ojos.
― ¿entonces?―
Janet alzo
una ceja.
―por si no
te has dado cuenta, peligramos todos, no es el momento para tener―
Pero Kento
no espero ni un segundo más y tomándola de los hombros la llevo hasta el otro
extremo de la pared acorralándola y acto seguido la beso de manera posesiva.
En pocos
instantes ya Janet había aceptado aquel beso, pero de la misma manera se separó
del chico, pero Kento la tomo de la nuca, sus ojos tenían un brillo peligroso,
un brillo que ella jamás había visto en él, el alto paso su pulgar por la
mejilla izquierda de una nerviosa Janet.
―solo dices
eso porque si algo llega a pasarme no quieres sufrir por mi… o… por el simple hecho
de que fui Yankee te asusta que llegue a peligrar tu vida a mi lado, pero no,
no soy un chico violento, aprendí a defenderme, si no estaba con ellos, estaba
solo y moriría con facilidad, en un mundo tan opuesto a esta jaula de cristal…
un mundo donde si no aprendes a defender tu orgullo, puedes morir―
Janet miro
atenta cada palabra de Kento, este era el chico peligroso del cual temía ver
desde que se enteró de su pasado.
―porque
llegaste a Horikoshi?¿―
Pregunto con
temor, posando una mano en el pecho del chico.
―luego de
la muerte de mamá, el señor Nakajima se hizo cargo de mí, a pesar de que no fui
rechazado ni por Raiya ni Yuto, preferí seguir viviendo solo, aunque todos esos
gastos los haga mi padre, no quería arriesgarme a que ellos le hicieran daño a
mi familia―
Kento a
cada palabra se acercaba peligrosamente a los labios de Janet, está ya no podía
seguir conteniendo la respiración, menos sus ganas de besar aquel chico que
ahora si le parecía más atractivo mostrando su verdadera cara.
―Ke-Kento…
― ¿si?―
Ambos se
miraban con gran deseo de que esos milímetro se terminaran y al fin besarse,
pero Kento aun podía controlarse, solo un poco.
―tu…también…me
gustas…―
Sonrió de
lado y termino por besar a la chica, un beso apasionado, hambriento, deseado.
―estos dos…espero no piensen seguir―
Dijo Adari mirándolos
desde la puerta de la oficina, había escuchado gran parte de la conversación,
pero nada que le sirviera, regreso a su oficina y miro por la ventana.
― ¿Qué tanto vera Yuma cuando se asoma aquí?―
Se dijo
para sus adentros mirando por aquella ventana, se podía observar todo
Horikoshi, pero también gran parte de la ciudad, hasta que algo capto su atención.
―Kira?―
…
― ¿Por qué desconfiaste
de él si sabes que te ama? Eres una completa estúpida Takahashi.―
Se burló
Iguchi cruzada de brazos mientras miraba a Kira con desprecio.
―tú no
sabes nada sobre Daiki y yo, no actúes como si lo supieras todo―
Una pequeña
risa escapo de los labios de la contraria, haciendo enojar más a Kira.
―pero si
toda la escuela sabe que eres una insegura y una deshonra para las Reinas, ni
siquiera eres una princesa oficial, tan solo eres una de esas que se hacen
llamar princesas porque salen con alguno de los chicos―
Kira no
soporto más y cuando fue a darle la bofetada a la chica, esta le detuvo la
mano, pero Kira levanto su pierna, logrando darle en las costillas y hacerla
caer.
Ambas llevaban
rato peleando en la azotea de aquel edificio, pero ahora estaban golpeándose,
Adari salió de su oficina sin importar interrumpir a la parejita.
―Janet,
problemas con Takahashi e Iguchi―
Janet se limpió
los labios lo más rápido que podía, y se siguió el paso algo apresurada detrás de
Adari y Kento de igual manera fue tras ellas.
Cuando llegaron
encontraron a una muy mal herida Aimi y una Kira echa furia.
―Takahashi!,
¡¿pero qué te pasa!?―
Grito Janet
llegando a Aimi y junto a Kento, la levantaron y luego Kento se la llevo a la enfermería,
Adari y Janet miraron con enfado a la chica.
―para lo
que puede importarme ser igual que mi Hermana―
Escupió con
odio, Adari se acercó a Kira y tomándola del cabello la hizo caminar hasta una
de las orillas del edificio.
―mira lo
que está pasando allá―
Janet asustada
por la actitud de Adari temió si acercarse sería bueno.
―la sucesión
está cerca Kira…y tal vez puede que no llegue, si sabes cómo era Tomohisa
Yamashita, ¿verdad? Sabes el daño que puede hacerles a todas nosotras ¿verdad?―
A cada
pregunta tiraba del cabello de la chica, esta tan solo se quejaba.
―si
queremos limpiar el nombre de las reinas y de Horikoshi, vas a cooperar,
¿entendiste?―
La chica
entre lágrimas cayó al suelo mojado.
― ¿Por qué yo?―
Adari se acomodó
su uniforme, Kira aun miraba el suelo.
―porque
eres descendiente directa de Minami y ella misma pidió que te educaran, pero te
has salido de nuestras manos cuando te enamoraste de Arioka y tú misma hermana
nos pidió que te destituyéramos―
Adari se marchó
de allí y Janet se agacho a levantar a Kira.
―esto no
estuviera pasando si mis sentimientos por Daiki no se hubieran involucrado―
Dijo entre sollozos.
―si tú
fueras impedido lo que paso con Abe-san, nada de esto pasaría y tu hermana no
te culparía de nada―
Kira se abrazó
a Janet, Abe Maria, una de las empresas más importantes de Japón, tenía que
seguir dentro de Horikoshi, pero Kira tenía una responsabilidad, que ningún chico
o sucesor tocara los sentimientos de Abe, pero era imposible, en el corazón no
manda nadie, pero aun sabiendo eso, dejo sola a Maria, haciendo que a las
semanas, la chica en su auto, explotara sin ningún tipo de detonador, la explicación,
uno de los enemigos de la compañía Abe, ¿ y donde estaba Kira? Pues Kira estaba
teniendo una cita con Arioka Daiki, muchos dijeron que no era su culpa, pero
Kira sabía que sí, ella tenía que acompañar y llevar a Maria hasta la su casa,
su hermana, Minami Takahashi, la destituyo por dos razones, una de ellas era
descuidar a Maria y la otra era salir con Daiki, en aquel momento, los chicos
no eran de total confianza.
En la tarde…
Zumiko ya
comenzaba a sacar sus cosas del locker para así ya al fin irse a su casa en
vacaciones, si no fuera porque su amiga estaba perdida, luego de la conmoción
con lo que había pasado entre Iguchi y Takahashi, la tuviera cerca, resignada
fue a buscarla al salón del consejo estudiantil y congelada detrás de la
puerta, escucho la inconfundible voz de Hikaru, su ahora ex novio y su amiga
Keiko.
―te dije
que a metros de distancia de mi Yaotome―
Dijo una
Keiko muy enfadada.
―sabes que
no me separare de ti, Te amo Keiko, pero eso tu no lo entiendes―
Hikaru
estaba decidió a todo, incluso los golpes de Keiko.
―yo ya
estoy bien con Tama-chan―
―Tama-chan,
Tama-chan, sales con un Puto universitario que ni amas, deja de engañarte, sé
que lo que paso en la playa estuvo mal, debí ser más claro cuando lo hicimos―
Gritoneo
Hikaru.
―fue un
error, ¿sabes lo mal que me siento? Engañe a mi amiga con su novio―
Se señaló a
ella misma arrugando sus cejas.
―ex novio―
Keiko lo quería
matar con la mirada, pero en ese momento, la puerta se abrió, Zumiko entre lágrimas
miro a ambos.
―Zu-Zumiko…
Dijeron ambos
con temor, pero más Keiko, no quería perder a su amiga de esa manera.
…
―Yuri―
La puesta
de sol nublado era algo triste y Yuri la miraba atentamente, La pequeña chica
se acercó y toco su hombro.
―…Yu―
― ¿Qué quieres?―
Dijo seco, áspero,
sin vida.
― ¿Qué haces
aquí?―
Aparto su
mano que aún seguía en el aire, pero ni siquiera se movió.
―esa misma
pregunta te hago yo a ti, Susana, ¿Qué haces aquí?―
La chica sintió
su cuerpo temblar, aquel chico que le daba la espalda, ladeo la cabeza mirándola
sobre su hombro, aspirando fuerte, la chica tomo el valor necesario para
hablar.
―yo… quería
hablar contigo―
Dijo muy
seria, no quería sentirse inferior a Yuri, este tan solo se giró sobre sus
talones para mirarla.
―sé que
esto no funcionara de nada, pero igual quiero decirlo, se algunas cosas sobre
ti, sobre tu pasado, y créeme que lo que hayas echo, quiero ser yo quien este a
tu lado curando tus heridas, pero también sé que no quieres que nadie este a tu
lado, pero aun así, me gustas, me gustas desde que te vi el primer momento, me
gustas y te seguiré amando y aceptando todo de ti, pero también necesitas tu
momento a solas, y lo mereces―
Susana no despegaba la mirada de un chico que
se veía vacío, necesitado de atención, pidiendo a gritos a alguien que lo
pudiera curar, y Susana creía que ella podía hacerlos, si él se dejaba.
Yuri tan
solo se quedó allí escuchando cada palabra de la chica, ella, ella que siempre creyó
jamás ver declarándose frente a él, no después de saber todo lo que paso.
El viento
frio soplaba, ya pronto llegaría la primera nevada de invierno y Horikoshi
Gakuen estaba desolada, fría y vacia.
Comentarios
Esa Kira si me saca la piedra XD